El PSOE de Hellín denuncia la subida “más regresiva e injusta” de tasas en la historia del municipio

El portavoz del Grupo Municipal Socialista, Ramón García, ha calificado de “una de las decisiones más regresivas y demoledoras que ha tomado esta Corporación en su historia reciente” la aprobación de la nueva ordenanza fiscal reguladora de la tasa por la prestación del servicio de recogida, tratamiento y eliminación de residuos sólidos urbanos.

Según ha explicado, la modificación impulsada por el equipo de gobierno del Partido Popular, con el apoyo de VOX, supone “la mayor subida de tasas de la historia de Hellín”, alcanzando en muchos casos incrementos del 300 % al 500 % en los recibos.

Ramón García subrayó que, si bien el PSOE comparte la necesidad de actualizar la tasa para cumplir la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados, “el problema no es la subida, sino la forma en que se ha hecho”. “El Partido Popular ha elegido el modelo más recaudatorio, el menos justo y el más insensible socialmente”, denunció.

El portavoz socialista explicó que una vivienda residencial pasará de pagar 47,45 € a 142,50 € al año, mientras que los establecimientos hosteleros verán su factura incrementarse hasta un 450 %, alcanzando los 570 € en algunos casos. “Lo que aprueban hoy es un golpe de gracia a las familias y a las empresas locales”, señaló.

García reprochó al PP y a VOX haber vinculado la tasa al consumo de agua, una medida que
considera “arbitraria e injusta”: “¿Qué tiene que ver el consumo de agua con la gestión de residuos? Una familia de tres miembros puede gastar la misma agua que una de seis, pero evidentemente no genera la misma basura.”

Asimismo, criticó que las bonificaciones sociales sean “simbólicas y absurdas”, ya que solo contemplan reducciones del 20 % en casos muy concretos, como la participación en programas de compostaje o el uso del punto limpio más de 11 veces al año. “Bonificar 9 € por 11 viajes al punto limpio no es una ayuda, es una burla. Se gasta más en gasolina que lo que se bonifica”, afirmó.

El PSOE ha propuesto alternativas más justas, como bonificaciones a rentas bajas, familias numerosas, mayores de 65 años o personas con discapacidad, así como exenciones a entidades sociales y la aplicación de los bonos sociales de agua a la tasa de residuos. También ha planteado aplicar la subida de manera gradual, un 10% o un 20% anual, para evitar el impacto súbito en la economía local.

En su segunda intervención, Ramón García denunció además que la ordenanza no aplica
correctamente el principio de “quien contamina paga”, al excluir a determinados generadores de residuos, como el Mercado de Abastos, los mercadillos o las viviendas situadas fuera del casco urbano. También alertó de discrepancias en el censo y el estudio económico-financiero, que podrían estar provocando un reparto desigual de la carga fiscal: “Hemos comprobado que algunos bares pagan como si fueran domicilios particulares. Si el censo está mal, el estudio económico pierde validez.”

García instó al equipo de gobierno a dejar la ordenanza sobre la mesa y trabajar de forma conjunta para corregir los errores detectados, actualizar el censo y estudiar las propuestas socialistas. “No hay prisa. Tienen tiempo suficiente hasta que el nuevo contrato de recogida sea una realidad. Aprobar ahora esta tasa es únicamente una maniobra para cuadrar el presupuesto e ingresar 1,7 millones de euros”, además “de un fraude al ciudadano por cobrar una prestación antes de que el nuevo servicio se ponga en marcha” advirtió.

El portavoz socialista concluyó asegurando que el PSOE votará rotundamente en contra de una
ordenanza “lesiva, injusta y antisocial”, y reafirmó su compromiso con una política fiscal que
combine sostenibilidad ambiental con equidad y justicia social: “No nos oponemos a cumplir la ley, pero sí a que se haga a costa de las familias hellineras. Hay alternativas y voluntad para hacerlo mejor; lo que falta es sensibilidad y responsabilidad política.”