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Ayto Hellin

Hellín reclama su pasado

Hace unas pocas fechas, el hellinero Alexis Armengol (Licenciado en Historia del Arte y Arqueología, Master en Métodos de Investigación Avanzados con la Especialidad de Arqueología y Prehistoria) hacia público su descubrimiento sobre, el posible, expolio que podrían haber sufrido las Pinturas Rupestres de Minateda (Una figura de una cierva marrón perteneciente al arte oriental español), datadas de hace cerca de 9.000 años y declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1988. “Federico de Motos le había indicado a Henrique Breuil, que en aquel paraje se conservaban unas pinturas equiparables, en su opinión, a las de Altamira”. Esta “cierva” estaría localizada por Armengol en Francia y es lo que se pretende recuperar para que conste en el Patrimonio hellinero.

Foto: Ls Cerca

Ahora el Ayuntamiento de Hellín, por acuerdo plenario, realiza una Propuesta de Alcaldía para la investigación y recuperación de la pieza procedente del Abrigo del Canalizo del Rayo y expone ampliamente la historia y motivos por los cuales realiza esta petición.
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS:
El descubrimiento de las pinturas rupestres del Abrigo Grande de Minateda se produjo en los primeros meses de 1914. Desconocemos la fecha exacta, aunque probablemente sucediese en el mes de mayo, puesto que el mes siguiente Federico de Motos envió una carta con la noticia del hallazgo al abate Henri Breuil, el conocido después como el “papa de la Prehistoria”. Este presbítero francés consagró casi toda su vida al estudio de las manifestaciones gráficas prehistóricas en todo el mundo y fue él quien se encargó de poner en conocimiento el hallazgo.
El descubrimiento solo fue en parte casual. A raíz de los hallazgos que se estaban produciendo en el sureste peninsular, Breuil comenzó a promover la búsqueda de nuevos lugares financiadas con fondos de diversos donantes franceses. La influencia del francés era ya enorme por aquel entonces, y había establecido una red de colaboradores por toda la Península que le mantenían informado de cualquier descubrimiento. Uno de los prospectores era Juan Jiménez Llamas, natural de Vélez Blanco (Almería), quien descubrió el Abrigo Grande y de algunos de los abrigos menores.
En 1914 Europa entera se debatía en el clima prebélico que poco después daría inicio a la Primera Guerra Mundial. La misiva de Motos debió ser recibida por Breuil aproximadamente un mes antes de que se produjese el fatídico atentado de Sarajevo, y con él la sangría que asoló Europa hasta 1918. La respuesta de Breuil fue rápida, pero los preparativos de su viaje para verificar de primera mano la importancia del descubrimiento se prolongaron más de lo que ambos hubieran deseado. Breuil había sido movilizado y no conseguiría desplazarse a España hasta ser declarado no apto para el servicio activo.
La llegada de Breuil a la estación de ferrocarril de Hellín se produjo en abril de 1915. Federico de Motos le había indicado que en aquel paraje se conservaban unas pinturas equiparables, en su opinión, a las de Altamira. En ese día marcado de abril de 1915 Motos y Jiménez Llamas debían esperar a Breuil en la estación de Hellín adonde llegaría en el tren correo procedente de Madrid. Federico de Motos debió recibir entonces el encargo de difundir el hallazgo, lo que realizó mediante cartas a dos de los personajes más influyentes en la arqueología del momento: Eduardo Hernández- Pacheco, director de la Comisión de Investigaciones Paleontológicas y Prehistóricas (CIPP) y el marqués de Cerralbo, jefe del partido carlista y promotor de gran parte de las exploraciones arqueológicas llevadas a cabo en España a principios del siglo XX.
Breuil trabajó durante un mes en las pinturas rupestres del Abrigo Grande, y en las descubiertas en los abrigos de la Higuera en el barranco de La Mortaja y Canalizo del Rayo. El resultado de aquel trabajo se publicó en 1920 y en él desarrolló una compleja secuencia de fases superpuestas que le sirvió para interpretar la cronología general del arte levantino. Del conjunto principal realizó calcos en color a mano alzada que no llegaron a publicarse en la monografía que tenía preparada sobre Minateda.
Años más tarde, en su publicación “Station moustérienne et peintures préhistoriques du “Canalizo el Rayo” de 1928, recogía y documentaba un yacimiento con material de época musteriense, haciendo referencia a la presencia de dos abrigos con arte rupestre, uno de ellos con una sola figura, una cierva marrón perteneciente al arte oriental español -una definición temprana de lo que hoy en día conocemos como arte levantino- y que hizo arrancar, llevándosela al Instituto de Paleontología Humana de París, que le subvencionaba sus investigaciones en España:
Breuil dejó por escrito ese acto expoliador, que pasaría por alto en posteriores publicaciones, pero que debió ser algo habitual en un momento en el que la legislación sobre patrimonio no protegía de manera adecuada esas recientes manifestaciones, desapercibidas por milenios y que en esos momentos se estaban poniendo en valor.
Prácticamente desde mediados del siglo XX, los numerosos investigadores, que han tratado en sus trabajos sobre el arte rupestre de Minateda han intentado localizar infructuosamente esa figura arrancada y solo ahora, el investigador hellinero Alexis Armengol, en el transcurso de la elaboración de su trabajo fin de máster, relacionado con la historia de la investigación del arte rupestre en relación con el Abrigo Grande de Minateda ha dado con la citada cierva.
Los prehistoriadores que intentaron seguir la pista a la cierva se ponían en contacto con el Instituto de Paleontología Humana de París, actualmente en funcionamiento, que manifestaba que entre sus colecciones no se hallaba ningún fragmento de arte rupestre levantino, por lo que la daban por perdida.
Una parte importante del trabajo de Alexis Armengol fue la localización del legado de Henri Breuil. En 1955 el prehistoriador francés se asoció con Arnold Fawcus, empresario británico, propietario de la editorial Trianon Press, quien adquirió los derechos de su producción científica. Desde entonces, Breuil junto a su discípula, la arqueóloga escocesa Mary Elizabeth Boyle publicaron varios volúmenes sobre arte rupestre surafricano.
Tras el fallecimiento del prehistoriador, Fawcus, en calidad de albacea, se dedicó a la adquisición y clasificación de su legado, que debía custodiar M. Boyle quien se estaba encargando de elaborar una biografía póstuma de su maestro. En 1974 al fallecer Boyle, los papeles y cartas, así como la biografía inédita, pasaron a manos de su editor, siendo finalmente donados a su muerte, por su viuda al Musée d’Archéologie Nationale de Saint-Germain-en-Laye.
La hipótesis de Armengol se basó en que dicha cierva podría formar parte de la colección personal del abate, no llegándola a depositar en el Instituto de Paleontología Humana, o tras su jubilación llevarse consigo los materiales.
Revisando las bases de datos del museo pudo dar con una pieza que presentaba una descripción que sin riesgo a equívoco se trata de la que se buscaba. En la descripción del bien se confirmaban las sospechas de Armengol ya que, según la ficha, pertenecía a la colección privada de Henri Breuil, pasando a propiedad estatal mediante donación. Realizando nuevas búsquedas, comprobó, además, como la colección de arte rupestre español, depositada en el museo parisino alberga un total de 16 fragmentos, procedentes de tres comunidades autónomas, entre ellos, varios de Castilla-La Mancha además del procedente del municipio de Hellín.
Sin querer denostar el trabajo realizado por Breuil, al que hay que agradecerle sus investigaciones y la difusión de este patrimonio tan importarte para Hellín, y pese a que hay que ser conscientes del contexto en el que se produjo la extracción de la figura, en un momento en el que este tipo de actos eran habituales y se recogían objetos y piezas como pago por los servicios de investigación realizados, debemos tener presentes que el acto realizado por el francés en el Abrigo del Canalizo del Rayo no estaba permitido ni por las leyes vigentes en aquel momento ni por las actuales.
Se trata de un acto de expolio o expoliación, que según define la propia Ley 16/1985 de Patrimonio Histórico Español en su artículo 4: “es toda acción u omisión que ponga en peligro de pérdida o destrucción todos o alguno de los valores de los bienes que integran el Patrimonio Histórico Español, o perturbe el cumplimiento de su función social”.


Hoy, gracias a la investigación de un joven hellinero, Alexis Armengol, al que debemos agradecer su constancia, paciencia e intuición, conocemos el paradero de esta pieza, que debería ser restituida a su lugar de origen.
SOLICITUD:
-Solicitar al gobierno de CLM, a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, o a la Viceconsejería de Cultura la colaboración institucional y conceda los permisos para que Alexis Armengol pueda continuar su investigación comprobando in situ la existencia de estas piezas en el Musée d’Archéologie Nationale de Saint Germain-en-Laye, pudiendo, de esta forma, documentarlas convenientemente.
-Solicitar al gobierno de CLM, a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, o a la Viceconsejería de Cultura que se inicien los trámites y contactos, junto con las otras comunidades autónomas afectadas, y el Ministerio de Cultura, para solicitar la devolución al Gobierno francés de estos objetos, para que estos puedan ser restituidos y expuestos en sus lugares de origen.
-Solicitar al gobierno de CLM, a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, o a la Viceconsejería de Cultura que, si se consiguiera la devolución de estos bienes, la pieza procedente del Abrigo del Canalizo del Rayo pueda ser depositada para su exposición en el Museo de la Semana Santa y Tamborada de Hellín Rafael Sánchez Hortelano, (MUSS), independientemente de la titularidad que pase a tener tras esa recuperación.”

Foto: Turismo Hellín

Secretaría de PLENO
FIRMADO POR
En el expediente consta dictamen favorable de la Comisión Informativa de Cultura, Patrimonio Histórico y Cultural, Feria y Fiestas, adoptado por unanimidad, en sesión celebrada con carácter ordinario el día 18 de octubre de 2021.
Tras su debate, sometido a votación, el Sr. Alcalde manifiesta que el Pleno de la Corporación, por unanimidad de Sres. asistentes, ACUERDA:
1º.- Solicitar al gobierno de CLM, a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, o a la Viceconsejería de Cultura la colaboración institucional y conceda los permisos para que Alexis Armengol pueda continuar su investigación comprobando in situ la existencia de estas piezas en el Musée d’Archéologie Nationale de Saint Germain-en-Laye, pudiendo, de esta forma, documentarlas convenientemente.
2º.- Solicitar al gobierno de CLM, a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, o a la Viceconsejería de Cultura que se inicien los trámites y contactos, junto con las otras comunidades autónomas afectadas, y el Ministerio de Cultura, para solicitar la devolución al Gobierno francés de estos objetos, para que estos puedan ser restituidos y expuestos en sus lugares de origen.
3º.- Solicitar al gobierno de CLM, a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, o a la Viceconsejería de Cultura que, si se consiguiera la devolución de estos bienes, la pieza procedente del Abrigo del Canalizo del Rayo pueda ser depositada para su exposición en el Museo de la Semana Santa y Tamborada de Hellín Rafael Sánchez Hortelano, (MUSS), independientemente de la titularidad que pase a tener tras esa recuperación.
Tras la votación de este punto del Orden del Día, el Sr. Alcalde pide expresamente que conste en Acta una felicitación a D. Alexis Armengol García de parte de todo el Pleno Municipal por el trabajo de investigación que ha realizado.
Expido la presente certificación, incursa en el artículo 206 del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales, en la fecha indicada al margen, de orden y con el Visto Bueno del Sr. Alcalde, a los efectos oportunos

Foto: Turismo Castilla-La Mancha

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